El silencio arrulla los cuerpos abatidos;
que esperan desnudos frente al universo.
EL sexo ha destruido todo a su paso
solo resta el cansancio.
Los cantos de la piel acallan;
entre las caricias que envejecen en las manos.
Ausencia en el lenguaje que yace marchito;
por la llegada tardía del amor.
Quietud en las almas,
los desnudos se evaporan en la humedad.
En los ojos un recuerdo se disipa entre la luz;
que descubre las conciencias incompletas.
El último aliento sale en busca del beso;
que a media noche abandono nuestros labios.
El amor es inhallable,
todo perece en el. JJ.Solana
22.5.10
Perecer
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2 comentarios:
Perfecto poema, para reflexionar. Cuan cierto lo que dices.
Saludos cordiales,
Aída
Lindo...diferente también
Y tienes razón todo perece en el amor
Tiempo sin pasar, me enreda el tiempo y a veces la vida
Un besote.
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